
Las VARICES se producen por un mal funcionamiento de las válvulas venosas.
Generalmente, son de origen genético, existiendo claramente una predisposición hereditaria a padecerlas aunque, según el tipo físico, el tipo de trabajo, el modo de vida, la obesidad y la constitución física, se favorecerá la aparición con mayor o menor frecuencia.
Afectan al sistema venoso superficial. Este fallo valvular hace que la sangre circule en sentido inverso, lo que provoca un aumento de presión en las zonas afectadas que da lugar a los síntomas varicosos:
- Pesadez
- Inflamación
- Calambres
- Hormigueos, etc.
Con el tiempo, la evolución puede dar lugar a cambios en la piel: pigmentaciones, atrofia cutánea y, en su grado máximo, úlceras venosas.
Aproximadamente un 65% de la población presenta algún tipo de varices, por lo que es una patología con muy alta prevalencia.
Existen varias clasificaciones para las varices pero, atendiendo a su tamaño, éstas pueden ser:
- Grandes Varices: Tronculares o accesorias
- Tamaño Mediano: Varices reticulares, varices telagiectásicas.
- Microvarices: Arañas, filamentos.
Aunque con el tratamiento las varices tratadas quedan eliminadas para siempre, la enfermedad venosa que las provocó y que denominamos “Insuficiencia Venosa Crónica” no desaparece, es una enfermedad crónica y, como tal, exigirá controles periódicos para valorar y controlar su evolución y, así, solucionar aquellas situaciones nuevas que se produzcan.
La Unidad de Flebología y Medicina Vascular Estética de nuestra clínica está dirigida por el Dr. Juan Navarro.
- Médico con experiencia de más de 20 años en flebología.
- Experto en Ecografía y Eco-Doppler SEECO – SEMG.
- Miembro de la SEACV (Sociedad Española de Angiología y Cirugía Vascular), Capítulo de Flebología.
- Miembro de la SIF
- Uno de los Médicos pioneros en España en el tratamiento de las varices con microespuma.
- Desarrollador del Protocolo Personal “RSV” (Radical System Veins) que lleva empleando en sus pacientes desde 1992 con cientos de casos tratados en España y Portugal.
Se trata de un sistema protocolizado y minucioso que permite controlar la densidad, la cantidad, la localización y el tiempo de contacto del producto esclerosante inyectado, con la capa íntima de la vena, con la precisión imprescindible para conseguir un resultado óptimo y duradero.
El tratamiento es totalmente ambulatorio y el paciente puede continuar de inmediato sus actividades habituales sin necesidad de ningún tiempo de recuperación.
El paciente debe llevar obligatoriamente unas medias especiales durante unos días y acudir a revisiones para completar el tratamiento y eliminar también las microvarices, consiguiendo así un resultado no solo médico, sino también estético, dejando las piernas limpias.
La eliminación de las venas enfermas mejora la circulación, ya que el organismo crea una nueva vascularización y la sangre circulará por venas nuevas y sanas, compensando con total efectividad las venas eliminadas que no son funcionales y que el organismo desecha.